Dreaming about the things that we could be

Dreaming about the things that we could be

miércoles, febrero 18

Encrucijada.


¿Dónde se encuentran las respuestas? ¿Cómo? ¿Qué es lo que hace uno cuando se encuentra frente a un sinfín de posibles caminos?

Quiero tantas cosas y al mismo tiempo no quiero nada, tengo tantas opciones pero ninguna me anima tanto como para hacer todas las demás a un lado. Siento que el tiempo corre y que cada segundo que paso sin tomar una decisión continúa atrasándome más y más.


Si solo tuviera el valor de perseguir mis sueños, si solo me atreviera a pensar que lo que quiero es posible, si solo me permitiera creer que puedo ser quien yo quiera ser…

sábado, febrero 14

Ir y venir..


Tal vez todas las personas que entran en nuestras vidas vienen para enseñarnos algo, algunas se quedan más tiempo que otras pero probablemente esto sea en función de lo que debemos aprender de ellas.

Quizá, si permanecieran durante más tiempo nos haría daño y no podríamos cumplir el objetivo que Dios tiene para nosotros.

Lo más importante es que logremos reconocer para lo que estuvo tal o cual persona en nuestra vida. Tal vez para darnos una lección, para motivarnos, para ayudarnos a descubrir nuestro propósito, nuestro deber en este mundo, para hacernos creer en nosotros mismos, para probar nuestros límites o simplemente para que aprendamos a sufrir poquito y seamos más fuertes en el futuro, lo que es cierto es que ninguna persona se va sin dejarnos algo.

Es impresionante pero las cosas siempre funcionan el tiempo que deben funcionar y forzar aquello es ir contra la voluntad del Dios y de sus planes. Por más que intentemos que alguna circunstancia permanezca cuando su naturaleza es terminar, todo se pondrá en nuestra contra y será casi imposible que esto siga funcionando. Quizá existan personas que afirmen que esto es ser conformistas y no es más que aceptar el pesimismo, pero yo creo que todos sabemos cuándo un ciclo terminó, ya sea con una pareja, en un empleo, en un lugar, incluso en una amistad.

Así que aunque al principio pudiera parecer doloroso, inaceptable, cruel de parte del supremo e incluso pensáramos que alguien nos jugara una terrible broma, que alguien nos estuviera observando con una carcajada maquiavélica burlándose de nuestra desgracia, tal vez es solamente el destino que nos está preparando para lo que realmente merecemos.

Pienso, que es nato del ser humano superar las adversidades, superar los problemas y encontrar la manera, tal vez al principio solo de SOBREVIVIR, pero después de un tiempo te das cuenta de que nada es tan malo como parece en el momento y que la vida tiene que seguir.

Así nos envolvemos nuevamente en la vida y poco a poco vamos dejando atrás esas experiencias que en algún momento pensamos que nunca dejarían de doler, algunas llevan más tiempo que otras, algunas tal vez vivan en tu corazón para siempre, pero solo como un inquilino silencioso, que tal vez recuerdas con alguna canción, yendo a algún lugar, hablando con alguna persona, etcétera… Pero tarde o temprano tendrás que estar listo de nuevo para continuar, porque finalmente nadie puede quedarse acostado en su cama sin asomarse por la ventana para siempre.

Así pasa el tren de la vida, definitivamente este tipo de experiencias nos sucederán más de una vez en nuestro paso por este planeta, todo sirve, todo es energía que, así como llega se va.


Andrea González.